23/10/2018 Institucional
 

Enacom supervisó el uso del espectro radioeléctrico durante los Juegos Olímpicos de la Juventud Buenos Aires 2018

El Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom) fue encargado de monitorear las transmisiones televisivas, las comunicaciones de coordinación del evento, las cámaras y micrófonos inalámbricos, las mediciones de telemetría, tales como los sensores de movimiento de lucha, los sensores de velocidad de las bicicletas, entre otras, garantizando su optimo funcionamiento durante los JJ.OO.

El 18 de octubre concluyeron los Juegos Olímpicos de la juventud, Buenos Aires 2018, en los que participaron alrededor de 4000 atletas pertenecientes a 206 países, 8000 voluntarios y unos 85.000 espectadores a la vez distribuidos entre las 12 sedes. Las competencias que abarcaron 36 diferentes disciplinas fueron transmitidas en vivo y se proporcionaron datos en tiempo real.

 

 

 

Enacom fue uno de los organismos que participó activamente para que esto fuese posible ya que se encargó de gestionar las autorizaciones temporales para uso del espectro radioeléctrico, realizó el control de interferencias y verificó miles de equipos de comunicación y telemetría que fueron utilizados por los organizadores, las distintas delegaciones y la prensa.

 

 

 

La complejidad del evento requirió un gran esfuerzo por parte del organismo, que no sólo puso a disposición del Comité Olímpico Internacional su personal técnico de C.A.B.A., sino que debió convocar técnicos provenientes de los 6 centros que tiene Enacom en el país para integrar los grupos de trabajo que intervinieron en las tareas.

 

 

Durante todo el evento y desde varios meses previos al mismo, el Ente destinó personal administrativo y técnico al servicio los JJ.OO. Unas 46 personas, entre técnicos e ingenieros, estuvieron durante 20 días exclusivamente abocadas a las mediciones de campo y a la verificación de equipos.

 

 

La participación de Enacom comenzó a principios de este año con el relevamiento del espectro radioeléctrico en las futuras sedes y concluye con la desinstalación de las sondas fijas en la semana posterior a los JJ.OO.

 

 

Para la ceremonia inaugural que se llevó a cabo en el Obelisco, se montaron, además, equipos de radiogoniometría en las terrazas de los edificios de Perú 103 y Lima 1007, se desplegó personal con equipos de monitoreo portátiles cubriendo la zona peatonal, se apostaron vehículos en ambos extremos para controlar el perímetro inmediato exterior del evento.

 

 

Durante los juegos, Enacom tuvo presencia permanente en cada sede con grupos de dos técnicos (bajo régimen de relevos) con equipamiento portátil de monitoreo. De esta manera se logró resolver diferentes interferencias, por ejemplo, las provocadas por cámaras de video funcionando en frecuencias no autorizadas y que ponían en riesgo la transmisión televisiva de los eventos.

 

A fin de contar con alertas de interferencia tempranas, también se colocaron dos sondas fijas de monitoreo remoto del espectro radioeléctrico en terrazas de edificios de la Villa Olímpica y el Parque Sarmiento, respectivamente. Estas sondas funcionan con un software especialmente diseñado por el Enacom y fueron monitoreadas las 24hs.